miércoles, 6 de marzo de 2013

Sentimiento en el varal (Microrrelato)

Sonaron los dos toques de atención, uno más y se alzó el trono, aquella sensación de la primera vez que portaba a su Titular, esa mezcla de nervios e ilusión que se le reflejaba en la cara hacían notar la larga espera que tuvo que sufrir para poder meter el hombro.
Durante el recorrido fue comprobando lo que es sentir el frío varal y el calor que le daba el bendito manto de su Virgen. Dió las gracias mil veces por vivir aquellos mágicos momentos, pero tampoco olvidó la penitencia, rezó y pidió por todos sus seres queridos.
Tras el encierro, en la Casa Hermandad, se quitó la venda que cubría sus ojos, miró a su Virgen, le lanzó un beso, se despidió de Ella y marchó con la alegría de sentirse mujer de trono.

miércoles, 9 de enero de 2013

La penitencia de la penitencia

Es lo que le viene pasando a la victoriana cofradía de la Humildad. La suya es la Estación con más Penitencia de todas, su visita a la S.I.C.B. Los "condena" a encerrarse a las tantas de una madrugada desierta de público en las calles, cosa comprensible ya que el Domingo de Ramos estamos en pie desde bien temprano con Pollinica y Lágrimas y se nos presenta un Lunes Santo laborable para muchos.  

A pesar de todo, ellos afrontan el tema con muchísima Humildad, y sin alzar la voz, se encuentran a Merced de un cabildo catedralicio que se niega a trasladar la misa de las siete de la tarde a la Iglesia del Sagrario. Con este tema se me viene una pregunta a la cabeza, si por dimensiones todas las cofradías pudieran hacer estación de penitencia en nuestra Catedral, ¿Qué pasaría? ¿Tendrían todas las cofradías que solventar este escollo?

Se antoja difícil que para la Semana Santa del presente año pueda solucionarse el tema, por lo que volverán a encerrarse a esas intempestivas horas de la madrugada. Esperemos que pueda haber acuerdo el año próximo y que la Humildad pueda ver realizado su deseo de salir, y sobre todo de volver, más temprano.